Durante los meses de invierno, el hielo, la lluvia, la nieve y el frío son los protagonistas de cada día.

Por este motivo durante esta época del año debemos prestar especial atención al cuidado de nuestra moto. 

Las bajas temperaturas y las condiciones meteorológicas  pueden afectar negativamente a nuestra moto y causarla daños. 

Presta especial cuidado a:

Los neumáticos: al igual que es recomendable usar neumáticos de invierno en los coches también lo es para las motos, siempre que sea posible cambia los neumáticos por unos de invierno.

Revisa periódicamente el estado y la presión, en esta época del año es de gran importancia que las ruedas estén en perfecto estado.

Los líquidos y aceites: debes tener en cuenta que cuando se someten a cambios extremos de temperatura  se pueden alterar.  Cambia el líquido refrigerante y asegúrate que lleva anticongelante.

Lubrica los frenos, el acelerador, el embrague, etc.

La batería: es otro de los puntos clave a tener en cuenta ya que es uno de los componentes de nuestra moto que más sufre en invierno.

Si la cuidas adecuadamente podrás alargar su vida.

Mantén siempre limpios los bornes de excesos de sulfato o cualquier tipo de suciedad y protégelos con grasa para evitar la sulfatación, vigila su carga periódicamente. 

Siempre que sea posible guarda la moto en un lugar cubierto.

No olvides de utilizar el equipamiento adecuado para viajar en tu moto, no solo debes es abrigado, lo más importante es ir protegido en caso de accidente.

Siempre tenemos que ser prudentes y conducir con precaución, pero en esta época del año es importante extremar las precauciones.

La visibilidad es esta época del año se puede complicar y los riesgos aumentan, sobre todo en zonas dónde puedan formarse  placas de hielo.

Disfruta de tu moto, pero siempre con seguridad.

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